Convento Parador San Esteban de Gormaz

Templarios, Linajes e Hidalgos Descubre 8 siglos de Historias y Leyendas

El Convento de San Esteban de Gormaz fue construido bajo la Orden de San Francisco en el siglo XII. Tal es su carácter histórico que fue, desde al menos el primer cuarto del siglo XVI, lugar designado para elegir los oficios de los hijosdalgo de la villa. Honorables guardianes de las armas, las tierras y la administración local. El convento cerró sus puertas en el año 1837 (desamortización de Mendizábal), reabriendo en el año 1859, hasta principios de este siglo, como parador.

Hotel

Actualmente renovado, el Convento Parador dispone de 33 habitaciones, 30 dobles, 3 suites y 1 apartamento. Decoradas con esmero y respeto por su legado histórico, evocando episodios como el relatado en el Cantar del Mio Cid, cuando las hijas del héroe hallaron refugio y consuelo en San Esteban de Gormaz.

Spa

Un espacio concebido para el descanso y el bienestar, donde el tiempo parece detenerse. El spa ofrece circuito termal, piscina, sauna y una carta de masajes pensada para renovar cuerpo y mente. Completa la experiencia con una cabina de tratamientos y gimnasio para equilibrar relax y actividad, en un entorno que invita a desconectar y reencontrar la armonía interior.

Gastronomía

En el antiguo convento, alberga un museo-bodega que celebra la tradición vitivinícola de la Ribera del Duero y culmina en su restaurante, donde la cocina castellana y los vinos de la D.O. son protagonistas. La propuesta se completa con los sabores esenciales de San Esteban de Gormaz: el cordero ojalado, las setas y trufas de la tierra y el célebre torrezno de Soria con IGP.